jueves, 20 de agosto de 2009

...Y una muestra de ello...


Cuando solo me queda el domicilio
y sus nostálgicas sombras domésticas,
apela tu abrazo ausente.
Cuando las sábanas son mas frías
que tu condescendencia reconciliadora de los últimos veranos,
apela tu abrazo ausente.
Cuando se trepan las caricias
de melodías cromáticas ahora como muertos en pena,
apela tu abrazo ausente.
¿Cuándo los vientos del sur ...
...me llevarán más hacia el norte?
Allá.
Donde tú has despegado.
Para entender la insistencia de este abrazo.

¿Por qué un blog?

La necesidad de algo, de alguien mas, de una catarsis, de una comprobación o mas bien de una reafirmación en el descomunal espacio, de una banalidad mas, de una exagerada lucha con el dia a dia, con la indisciplina, con el argumento y el instinto, con el ser mas desconocido, con aquellos ojos frente a un sueño. Creo que un blog, asi como la sinceridad, la bondad, el odio, la crianza de nuestros padres, la guerra mas inolvidable, la lucha postrera, la crueldad, el peso de las cosas, el amor, es un arma de doble filo.