...soy yo.

No eres tú...soy yo. Soy yo el que ya no soporta tu respiración recorriendo mi mejilla al despertar. Soy yo el que ya no quiere ver más esa sonrisa dibujada por las luces de la noche al cruzar una avenida o abrir mi correo y encontrar una nueva dedicatoria musical que me hará odiar a mis bandas favoritas. Soy yo el que quiere estar contigo cuando estoy sin ti, pero que quiere estar con todas las demás cada vez que estamos juntos.

18 de mayo 2012

Su dolor le conmovió tanto que no pudo dejar de ser sincero. 

Si decides seguir viviendo tienes dos únicas opciones verdaderas. Seguir el camino de la humanidad y programar tu cerebro para el olvido; o sufrir su ausencia por el resto de tus noches. Con la primera volverás a ser feliz. Con la segunda tendrás que soportar la lástima más humillante disfrazada de comprensión.

17 de mayo 2012

No estaban hechos el uno para el otro. Pero para ellos lo importante era no estar solos. La frivolidad de su amor, que era una expresión más de la superficialidad de sus vidas, los hizo felices.