jueves, 26 de noviembre de 2009

La Buena Vida




Es que a mí La Buena Vida, me cambió la vida. Se sorprendió de mi inocente confesión y una ligera sonrisa piadosa se dibujo en él. Ahí entendí que tal vez era demasiado cursi. Hablo de mí. Pero no era así. En verdad, me cambió la visión del arte y del amor, por lo tanto de la vida. Llegué a ellos por mi amigo Alonso, con la previa advertencia de que era medio ‘romanticón’, pero orquestado. En ese tiempo, fiel oyente de otros estilos de música radial y supuestamente rebeldes, acepté darles una oportunidad y no paré de escuchar en una sola noche cerca de cien veces, dándole stop-rew-play a mi casetera, ‘Buenas Noches Mal Dispuestas’, el tema que abre el disco “Soidemersol”, uno de los trabajos más cruelmente románticos que existen. Una obra de arte del pop, reseño una revista de mi país, mucho tiempo después de haberlos conocido y terminar encantado y mutado por el disco. Cada tema de este álbum es inolvidable e irrepetible, a pesar de sus lugares comunes.

Para mí significa Los remedios. Me miró con una cara tan piadosa como la de su amigo. No creo, sería feo entonces, creo que va por el lado de una unión poética de soy de mar y sol, así me dijo ella. Entendí que tampoco había entendido el disco como yo lo había entendido. Pero gracias a ella logré escuchar más canciones de la banda, el “Vidania” completo y temas de Ep’s que son lo que más han editado en su larga historia. Pero este disco es distinto del Soidemersol, mientras en efecto, éste suena a una orquesta linda en una fiesta familiar, el “Vidania” es guitarrero, de letras más cotidianas e urbanas, se gestó cuando uno de los miembros de la banda dejo la natal Donostia para vivir en Madrid. La voz de Irantzu Valencia hizo lo demás. ‘Mi aventura espacial’ es inolvidable.

Como a ti te gusta La Buena Vida, ‘checa’ este blog. Y me topé con el “Hallelujah!” un disco del 2001 donde entre otras, viene el tema ‘¿Qué nos va a pasar?’, demasiado honesta para corazones perseverantes en el amor eterno. Demasiado dolor matizado en una canción. Y también demasiado bonita como para no escucharla. Hasta el momento tengo mi discografía completa, seguro que me toparé con ellos de casualidad algún día por ahí o por acá. Lo último que leí por ahí fue que la vocalista se fue de la banda por asuntos familiares y que en uno de sus últimos conciertos ya no tuvieron la acogida de antes. Son diecisiete años.

Delinke:
Soidemersol (1997):

Vidania (2006):

2 comentarios:

magita dijo...

Buenas cosas mal dispuestas fue la primera que escuché,debo decir gracias creo...pero después de eso surgió el efecto encantador de esta banda.Es inevitable sentir Con La Buena vida.

mmaattaazz dijo...

Orale pués con la reseña dan ganas de checar, además que un grupo se llame 'La Buena Vida' ya es sintoma que debes oírlo.